domingo, 24 de abril de 2011

COSAS DE LA COLONIA


Como bien sabemos, los jesuitas formaban una poderosa orden, que se dedicaba a la fe, a las misiones, al campo, a la orfebrería y a las boticas.
Revisando los viejos archivos hemos encontrado una lista con las drogas que se guardaban en una botica jesuita en tiempos coloniales. Vamos revisando:
Agua de capón; enjundia de cóndor; bálsamo de calabazas; ojos de cangrejo; sangre de macho; piedra de araña; diente de jabalí; ranas calcinadas; príapo de ciervo; uña de la gran bestia; unicornio verdadero; aceite de lagarto; aceite de alacranes; espíritu de lombrices y pulpa de caña fístola.
Si con esos remedios no se mejoraba, era mejor encomendarse a alguno de los santos de aquellos entonces.
Y si de santos se trata, hubo algunos años en los tiempos de la colonia en que los días festivos alcanzaron ¡hasta los noventa! Algo así como tres meses de días feriados o casi un cuarto de año.

1 comentario:

  1. Genial Antonio, muy sabrosos trozos de la historia. Lo voy a consultar con los jesuítas que conozco, a ver si les queda un saldito...

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